PLAYAS, POLICIA Y CERVEZAS

Hemos pasado una semana descansando por las playas del norte. De Pangani a Bagamoyo; un sitio pintoresco del litoral donde antaño desembarcaron grandes exploradores como Livingstone o Stanley...con un puerto pesquero que parece sacado de Piratas del Caribe y que antiguamente fue mercado de esclavos.

De Bagamoyo a Kilombe y de allí hasta Ras Kutani; para nosotros una de las mejores playas del norte, agua transparente, arena limpia, posibilidad de snorkel y acampada libre donde los pescadores locales nos acercaban a la mañana las langostas y el pescado fresco hasta el coche. Cena fresca fresca...

 Más perezosos que en ningún momento del viaje, continuámos camino hasta el sur hasta Morogoro, el caótico tráfico que rodea Dar Es Salam no nos ha dejado llegar más lejos, 150km de carretera asfaltada en un día...!Y tres altos en el camino de la policía con la intención de págame yo que sé que multas que alfinal han acabado en una multa de 3$ por pisar una línea contínua. Ojo porque es un tramo muy vigilado por la policía que se camufla entre los árboles de las grandes rectas y casi todos llevan radar de velocidad.
A pesar de que Morogoro no aperece en ningún sitio como lugar de interés turístico es un sitio tranquilo, rodeado de unos espectaculares montes donde se puede ver la auténtic vida local.

  Continuamos hasta Iringa donde queríamos visitar un par de lugares, entre ellos el Neema Crafft, un lugar gestionado por y para discapacitados. Fabrican todo tipo de útiles de hogar, vestidos, collares, pulsare, lámparas...con bastante buen gusto y mucha imaginación, también gestionan un restaurante donde se come bastante bien y a un precio muy racionable. Una buena iniciativa que deja bien claro que una discapacidad no merma nuestras capacidades.
Por lo demás Iringa no tiene mucho encanto.
Asi que trás hacer noche nos marchamos, como no, dirección sur. Llegamos hasta Mbeya con la noche bien entrada. El pueblo es un cruce de caminos con atascos permanentes, lleno de gasolineras y camiones que se dirigen a la frontera de Malawi o Zambia. Nos dirigimos a una misión cristiana en la que creémos que podemos acampar. Que lugar más tétrico y lúgubre...La imagen de un hombrecillo jorobado de noche y con gorro de lana a 25º de Temperatura ambiente abriéndonos una puerta con una cruz gigante en una de las ojas de la puerta nos resultó terrorífica. Creo que la única misión debería ser limpiar los baños de la misión!Y nosotros que creíamos que lo habiamos visto todo. Bueno deberíamos haber dicho olido, porque no hay luz ni en el parking ni en los baños. Con la luz del día lugar gana en amabilidad, aunque las personas siguen igual de grises.

 Visitamos el meteorito de Mbozi, que suena muy cool pero no deja de ser una piedra en una campa, nos dicen que tenemos que pagar 10.000 Tes cada uno por  verlo!!Menos mal que nuestro suawili y nuestro aspecto tanzano hace que la entrada nos cueste como residentes por 3000Tes los dos. je, je, je...Quizás sea por aquello de que las cosas que valen dinero pierden su valor pero hay teneis la imagen.

 Cada vez más cerca de Malawi, llegamos a un puente de lava que este sí que tiene más encanto, desde allí nos dirigimos a un campsite en Kibisi, un pequeño pueblo cercano, rodeados de plantaciones de té y plataneras en nuestra última parada tanzana.
Vamos hasta el mercado de Katumba por dar un paseo y ver un poco el pueblo y joder que ambientazo tú! una de las tardes más inolvidables de este viaje, nos llevan de un bar a otro donde todo el mundo está bebiendo cerveza de platano y maíz. Hasta las amamas bebían como marineros.
A la mañana siguiente camino a la frontera el autobús que nos acababa de adelantar se sale de la carretera y caé colina abajo hasta que un arbol lo para. En 15 minutos ya no queda ningún herido en el lugar, todo el mundo que ha pasado ha colaborado, pero ni rastro de policía o ambulancias!Menuda dosis de realidad... con cuerpo para pocas bromas llegamos hasta la frontera donde tenemos tiempo de relajarnos y ser conscientes de lo afortunados que somos.