NOS VAMOS DE SAFARI!!!

Salimos de Jolangalani a la mañana, después de despedirnos de medio pueblo junto al Hilton Hotel. Según nos alejamos, se acrecienta un nuevo ruido, paramos a revisar el coche y vemos que hemos perdido una balona de la suspensión delantera, afortunadamente nada grave y menos mal poruqe hasta Maral (240km africanos) no tendremos un taller en condiciones.
Seguimos dirección sur hasta South Hor, un pueblecito étnico muy bonito, rodeado de acacias y riachuelos donde paramos a comer rodeados de los más jovenes del pueblo; aprobechamos la temperatura del radiador para hacernos unos noodels metiendo la cazuela debajo del capó, rico rico...ya sólo nos queda beber líquido de frenos e inhalar monóxido de carbono. Jacin prepara la cazuela que vamos famélicos.

Continuamos sabiendo que no nos va a dar tiempo a llegar a ningún lado, asique buscamos un sitio apartado donde acampar y reparar el otro cierre de la tienda que también se ha estallado. Hoy la protagonista está siendo la caja de herramientas, parece que no quiera perderse el precioso atardecer ni la visita de unas avestruces y un chacal que reza  porque nos dejemos algo de basura olvidada. El amanecer igual de increible...

Llegamos a Maralal pasado el medio día, de la mano de los últimos huéspedes de nuestro asiento trasero, un padre y un hijo de la étnia rendille que nos llevan a un taller mecánico de su confianza y la verdad es que han hecho un trabajo fino, rápido y barato. Han reparado la suspensión, sustituido las pastillas de freno y cambiado los rodamientos de una rueda delantera que tenía un poco de holgura por el módico precio de 12$. Estas son las coordenadas por si a alguien le pudiera interesar N01º05.982´E036º41.932´.
Con el coche como nuevo vamos al Jani Campsite, un sitio bonito y económico de los que no abundan en Kenia y lo decimos por lo de económico, su dueño se dedica a la cria y alquiler de camellos para la famosa carrera de camellos que se celebra anualmente en Maralal, yo no sé que comen pero les dan unos gases....

Otro día de carretera flanqueados por elefantes, jirafas, antílopes y demás fauna salvaje, pasamos el ecuador.Hemos probado si en el hemisferio norte el agua gira en diferente dirección que en el hemisferio sur. Y podemos afirmar como científicos profesionales que es así. Richarddddd funcionaaaa!!!

Vamos hasta el Lago Baringo donde pasamos paganado menos de la mitad trás una ardua negociación al estilo de Baraka; cocodrilos, hipos, miles de aves y pescadito frito. Nos vamos fuera del pueblo para acampar libres.

Por fín llegamos al Lago Nakuru, uno de los mejores sitios de Africa para ver rinocerantes blancos y negros. Joder...ya puede ser porque la entrada para 24h nos cuesta la friolera de 220$ con acampada dentro del parque. Decidimos comer antes de entrar, por aquello de que las penas con pan son menos penas, pero ni por esas....un babuino nos ha robado el pan!!!NOOooooOOOO....!!!La cara de mono se nos ha quedado a nosotros.
El Parque Nacional de Nakuru es un sitio bonito en el que puedes ver los cinco grandes sin mucho esfuerzo, los animales están muy acostumbrados  a los coches. Aunque un búfalo ha perseguido nuestro coche con muy malas intenciones...pero no deja de tener ese aire a zoo, uno muy caro en el que todos los animales están en la misma jaula pero alfín y al cabo un zoo con una jaula electrificada y rodeada por la cuarta ciudad más grande de Kenia. ¿Dondé iría un león que se escapara de Nakuru? ¿Ha trabajar en la obra? ó ¿A un paso de cebra?. Para nosotros no vale lo que cuesta.

 Hacemos un parón de un par de días en Nakuru,  justo junto a la entrada del parque hay un resort, Kivu Resort que tiene una piscina e instalaciones muy buenas, la entrada a la piscina para los no huéspedes son 3€ por persona y día, un precio muy asequible y la piscina de un juego que no veas, flirteos, piscinazos, bailes...

Con las pilas cargadas seguimos camino hasta Longonot con intención de subir al cráter y medir nuestras fuerzas de cara a una posible ascensión al Kilimanjaro. Longonot es un cráter que en términos geológicos vivió rápido y murio joven, a lo Jeams Dean, sólo tiene 400.000 años, ¿Quíen puede resistirse a eso?
Bueno pues después de subir al cráter de Longonot puedo afirmar que estamos en condiciones de bajar el Kilimanjaro...casi tres meses de carretera y manta han hecho que sólo tengamos en forma el dedo con el que activamos el intermitente. Lo dejamos para otra ocasión IOGA.

Lo de la botella de brandy es miel casera ; )

A pocos kilómetros de Longonot empieza el asfalto, un descanso para nuestros doloridos cuerpecitos, pero era mucho más divertido ir por las pistas en las que circulábamos a la misma velocidad que los burros y podiamos hablar con su jinete durante cientos de metros, el peaje del asfalto...nos aleja de las personas. Tendremos que darle volumen a la radio ahora que funciona.
Ese mismo día nos acercamos hasta pocos kilometros de la puerta Sequenani del Mara National Park y al día siguiente entramos y hacemos noche dentro del parque en el Camp Olololo. Qué susto a media noche cuando nos ha despertado un animal respirado y pastando cerca de nuestra tienda encima del coche.
Decir que en el Mara Tringle hay mucha más fauna que en las llanuras y que sí que merece la pena apesar del precio. Animales en libertad...!
Nosotros particularmente lo hemos visitado sin guía y hemos visto muchos animales; leones, guepardos, rinos, la migración de los ñús, hienas, chacales, avestruces, elefantes...sólo nos ha faltado he leopardo.
No creemos que un guía sea necesario. Si se viene con un mapa del parque (ellos no te lo proporcionan) son fáciles de encontrar, cualquier guía de Kenia lo tiene y algunas además te indican en que zonas se avistan las diferentes especies.
Dos consejos: los buitres muchas veces llegan tarde al animal muerto, no merece la pena seguirles en busca del león, los que nuca fallan son los coches de las diferentes empresas de safaris, si se ven dos o más coches parados en un punto conviene acercarse a ellos.

 

Acabamos nuestra visita en Kenia con una última parada en Nairobi. es una ciudad bonita y con cierto encanto, donde hemos atacado a todas las hamburguesas que hemos visto...Y como no, hemos conocido a Moisés, todo un artista y visionario de la industria musical. Es el creador del género musical Massai y Gospel, nos ha dejado sin palabras...!

Nosotros estamos genial, HAKUNA MATATA!