martes, 26 de agosto de 2014

HACIA LAS MONTAÑAS ABISSINIAS

Ya en Etiopía, los trámites en Metema, primer pueblo etíope son igual o más sencillos que en su pueblo vecino, rápido sello en el cdp del coche y  en el pasaporte .
El contenido del pueblo cambia drásticamente y no sólo por el cambio religioso que se aprecia en la vestimenta de la mujeres,  sino por los clubs de alterne y las cervezas publicitadas graficamente cada pocos metros. Lo que en un lado de la frontera está prohibido,  en el otro abunda. Pasamos saludando ilusionados de entrar en un nuevo país.


Enseguida ganamos altura, la orografía cambia, altas montañas y puertos son un denominador común del norte de este país. Gente con ganado abunda por la carretera; vacas, ovejas, cabras e incluso camellos son conducidos por pastores que ni se inmutan al pasar frente a ellos por la carretera.
 
 




Estamos en época de monzones  y la temperatura desciende considerablemente.
Nuestra primera parada es Gonder, donde podemos beber después de mucho tiempo cerveza. Nos acompaña un paisano autóctono, seguro que conocido por muchos viajeros. Con mirada bicolor, baila como un loco con unas cuantas cervezas de más y música etíope marchosa.





Dejamos Gonder con resaca y nos dirigimos a Bahir Dar a ver el Lago Tana y las catarátas del Nilo Azul. Estas últimas las vemos en un su máximo explendor, toneladas de agua marron descienden varios metros oyéndose un continuo estruendo. Es sencillamente increible. Esa noche, nos cae sobre la tienda una gran tormenta, me siento insignificate y deseo que termine pronto.
 


Al día siguiente vamos hacia Lalibela. Largo camino hasta alli, por paisajes increibles que parecen sacados del Señor de los anillos, niños y niñas en mitad de la carretera cantando y bailando intentando conseguri Birrs, niños con rápidos látigos que a veces golpean a los vehículos y los como no, contínuos carruseles de vacas  y cabras.
Visitamos la famosa iglesia cavada y esculpida en roca Bet Giyorgis acompañados de niños locales que se las ingenian para enseñártela sin tener que pagar los 50$ por barba que vale la entrada.
Esa noche con leves síntomas de mal de altura hacemos acampada libre en lo alto de una colina en Lalibela, acompañados de otra tormenta.










 Nos levantamos pronto con la intención muy optimista de llegar ese mismo día a la capital, hacemos parte del largo viaje por pista, badeando rios y atravesando caminos practicamente intrasitables en muchas ocasiones. Decidimos parar a dormir en un pueblo a 300km de Addis Abeba, demasiado meneo para el body por hoy.
Charlamos con gente de allí, apasionados del futbol y de la liga española, comemos deliciosas samosas y al día siguiente llegamos a Addis Abeba.

  Addis Abeba es la capital de Etiopía y significa "flor nueva" en amharico. Es la principal ciudad del país y también la más desarrollada y la que cuenta con más infraestructuras, aunque a pesar de esto seguimos hablando de una ciudad muy pobre y con muy pocos recursos.


 
 





3 comentarios:

  1. Un calurosísimo abrazo de la persona que más os envidia.Sigo vuestras aventuras con todo el interés.Ese viaje os cambiará la vida.Con todo mi apoyo IOGA

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  2. Se me pone la carne de gallina chicos. Me encanta ver como disfrutáis y vais superando las adversidades. África es África y por muchos problemas que os surjan no olvidéis que ésta, es la gran aventura de vuestra vida!Un fuerte abrazo

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  3. IOGA que bien nos vendria por aqui tu experiencia; Orangu mandanos en telefono de Ewan Mcgregor

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